Veganismo: ¿Qué es ser ético hoy día?
Acaba de finalizar el mes del veganismo, o al menos el que empieza con el día que hace homenaje a un movimiento que algunos tacharon de moda, pero que está cambiando los hábitos de consumo y, en consecuencia, las formas de producción. Hoy lo revisamos junto a algunas de las firmas cosméticas que lo defienden.
Pitágoras, Platón o Einstein ya se mostraron en contra de la crianza de animales para el consumo.
El veganismo es, más allá de un conjunto de hábitos que afectan directamente al consumo, una ética basada en el respeto al otro, incluido en el concepto de “otro” a las especies no humanas. Según un estudio de Latern, en nuestro país el 7,8% de los residentes se consideran veganos y de ellos el 57% lo son por razones éticas (es decir, por estar en contra de la explotación y la violencia hacia los animales), frente al 21% al que mueve la salud y el 17% que consume vegano por ecología (motivos estos últimos que también podrían considerarse éticos pero ahora no vamos a entrar en este tipo de disquisiciones).
Hemos tardado “un poco” en reconocer que la proteína de origen animal no es necesaria para nuestra salud: eso ya lo sabían Pitágoras, Platón, Kafka, Leonardo Da Vinci, Einstein, Voltaire, Edison o Tolstoi… algunos de ellos fueron veganos cuando no existía ni la palabra. Todos defendieron la idea de una sociedad que no ejerza violencia ni explotación sobre los animales. “Nada beneficiará la salud humana ni incrementará nuestra oportunidad de sobrevivir a la vida en la tierra más que la evolución hacia una dieta vegetariana”, es una frase de Albert Einstein.
Tal vez la dieta es lo que más está costando. Que está calando se hace obvio en el hecho de que las grandes industrias de la comida rápida a base de carne, estén ofreciendo opciones veganas (como el Whopper Rebel del Burger King). Pero si hay algo en lo que las nuevas generaciones están marcando un cambio drástico, es en la moda y la cosmética. Sabemos que podemos vestir con tejidos sintéticos y que no necesitamos que las cremas contengan ingredientes de dudosa procedencia y mucho menos que se experimenten con animales. Además, puede que también influya el hecho de que es más fácil empezar por ahí que cambiar la dieta para todos los amantes de los animales que sufren si ponen conciencia en sus hábitos.
El consumo es activismo, eso es algo que tenemos, en pleno siglo XXI, muy claro.
La industria cosmética lo sabe: si antes era difícil encontrar productos para los veganos, ahora lo complicado es elegir entre tanta y tan buena oferta. Los laboratorios no dejan de estudiar alternativas y algunos de los hallazgos son españoles, como el colágeno vegano,-Prollagen-VG-, que Montibello utiliza en su línea Genuine Cell. Y las marcas de siempre se renuevan con promesas de ecología o presentan, como Clarins, que siempre se ha mantenido muy cerca de los ideales de los vegetarianos, una línea estrictamente vegana: la más joven, My Clarins. En Sephora se ha creado también una línea estrictamente vegana bajo el nombre de Good For.
Pero hoy día el consumidor de cosmética vegana no siempre lo hace movido por el activismo. Hay otros motivos como la calidad, como la aprensión a determinados ingredientes químicos y el gusto por los ingredientes naturales. En general, la cosmética vegana se acepta mejor por la piel y causa menos reacciones a las pieles sensibles. Hemos hecho dos preguntas a algunas de las marcas cosméticas que apuestan por este movimiento:
1- ¿Por qué consumir de acuerdo al veganismo?
2- El veganismo, ¿viene para quedarse?
Y estas son sus respuestas:
Steven Bullon, fundador y CEO de SCENS
“Respetar a los animales y ser vegano, es cuidar del ser humano”
¿Por qué ser vegano?
Ser vegano, es una filosofía de vida, un modo de consumir sin perjudicar al mundo animal. La pregunta es, ¿por qué deberíamos hacer sufrir a otro ser vivo? ¿Acaso no existen hoy en día miles de soluciones para vivir en armonía con la madre naturaleza y sin dañar al mundo animal? Consumir vegano es dar voz a esos animales que nos permiten también vivir en este planeta. Sin abejas, insectos y miles de especies, el ser humano no podría vivir en este mundo. Respetar a los animales y ser vegano es cuidar también a los seres humanos.
¿Por qué la gente joven viene exigiendo a la industria cosmética un compromiso con el veganismo?
Los jóvenes están muy sensibilizados con las barbaridades que estamos haciendo con el planeta. Ellos son el futuro y desde luego no quieren seguir con esta dinámica. No pretenden creerse los dueños del mundo y convertir la Tierra en un enorme vertedero y matadero. Consumir una cosmética vegana es participar en esta revolución. La que pretende que podamos vivir todos en nuestro fabuloso planeta, sin dañarnos los unos a los otros.
Pablo Valero, responsable de comunicación de weDo
“Nuestra marca apoya y refuerza el activismo del consumidor”
¿Por qué consumir de acuerdo al veganismo?
Ser vegano y adoptar acciones de consumo responsable supone contribuir a la sostenibilidad del planeta. En la actualidad el consumidor es cada vez más consciente de los productos y servicios que consume y hay una clara tendencia y predilección a adoptar marcas que generen un impacto positivo en el planeta, como es el caso de weDo/Professional y sus productos y tratamientos ecoéticos en salones.
¿Es una tendencia que viene para quedarse?
Los actos cuentan más que las palabras. Nosotros colaboramos con Plastic Bank, para recoger 8 envases de plástico del planeta por cada unidad de producto vendida. Así reforzamos y apoyamos el activismo del consumidor y contribuimos a que el consumo de belleza sea sostenible y genere un impacto positivo en el planeta.
Paola Gugliotta, doctora en dermocosmética y fundadora de Sepai
“Para sobrevivir de manera digna y sana, no tenemos que dañar a otras especies”
¿Por qué consumir de acuerdo al veganismo?
Para mí, el veganismo es activismo social. Es respeto al planeta y a los seres vivos, un activismo que solo pretende concienciar con el ejemplo.
¿Es una tendencia que viene para quedarse?
Ha habido un cambio de concepto, antes quien se hacía vegano, lo hacía mayoritariamente por un tema de salud. Hoy en día el veganismo impulsado por las generaciones más jóvenes y que viene para quedarse, es una apuesta por una vida mucho más consciente y respetuosa con el entorno y el medio ambiente. El veganismo parte de la firme convicción de que no se puede vivir a costa de los animales. Es una crítica al sistema, a la explotación animal y ganadera, a todo lo que el consumismo se lleva por delante. Los jóvenes en este sentido son una esperanza porque solamente así, mediante esta conciencia, podremos salir adelante como sociedad. Es un compromiso con la tierra y con todos los seres vivos, y una manera de entender que no tenemos que dañarnos los unos a los otros, tampoco a los animales, para sobrevivir de una manera digna y sana.
Arantxa Conde, directora de Relaciones Públicas de Lidl España
“En Lidl estamos apostando por líneas veganas y sostenibles empujados por la demanda del cliente”
¿Por qué consumir de acuerdo al veganismo?
Para ser respetuosos con el medio ambiente y con los animales. Es algo a lo que los consumidores dan cada vez más importancia.
¿Es una tendencia que viene para quedarse? ¿Estamos cambiando?
Sí, por supuesto. Las empresas tenemos un papel fundamental en el compromiso ético en la producción de nuestros productos. Más que una tendencia es una práctica que ha llegado para quedarse. En Lidl tenemos una estrategia de sostenibilidad, Reset Plastic. Y estamos incorporando cada vez más productos veganos tanto en alimentación, como en el territorio de la cosmética. Recientemente, presentamos la línea cosmética 100% vegana, Skin Foodies, realizada a base de alimentos. Ahora, hemos presentado nuestra primera línea cosmética BIO con una gama 100% vegana. La apuesta de la compañía está basada en la demanda del cliente.
Claudia Varanski, creadora de Varanski Naturals
“En cosmética no hay ninguna razón para usar ingredientes de origen animal. Los resultados de los productos veganos son incluso mejores”.
¿Por qué consumir de acuerdo al veganismo?
Es una cuestión de toma de conciencia. Somos la única especie que puede elegir conscientemente lo que consume, de modo que, ¿por qué no hacerlo sin afectar a otras especies? Ahora existen infinidad de marcas cosméticas veganas de precio similar o igual a los de las marcas tradicionales, y con resultados muchas veces superior. Así que, afortunadamente, es posible elegir.
¿Por qué la gente joven viene exigiendo a la industria cosmética un compromiso con el veganismo? ¿Es una tendencia que viene para quedarse?
Pienso que el cambio de paradigma es de raíz e irá a más. Ya no solo hay firmas específicamente veganas u orgánicas o raw, sino que muchas firmas convencionales se están reorientando para hacerse más verdes y respetuosas. Y lo cierto es que no hay razón alguna para añadir ingredientes animales a los productos cosméticos. En el tema alimentario hay un gran debate que puede desembocar en numerosas conclusiones nutricionales. En la cosmética no. La sociedad actual está mucho más interesada en el contenido de sus cosméticos, y también está mucho más informada. Los ingredientes animales no aportan nada esencial que no pueda ser sustituido por un ingrediente natural. No cambian la textura, ni el olor, ni el color. Los resultados pueden ser incluso superiores al usar productos veganos, ya que las plantas, frutas y verduras contienen un gran número de vitaminas y antioxidantes.
Susana Serrat, directora de Educación de Montibello
“Los nuevos consumidores son más exigentes: leen las etiquetas de los productos para ver su procedencia y composición”.
¿Por qué consumir de acuerdo al veganismo?
Seguir esta filosofía de vida tiene múltiples ventajas, como la prevención de enfermedades de tipo coronario, la mejora del estado de ánimo o el gozar de una mejor forma física. Además, a aquellos que siguen esta tendencia en todos los ámbitos de su vida les mueve también el alejarse de cualquier forma de explotación y crueldad hacia los animales.
¿Es una tendencia que viene para quedarse?
Absolutamente. Los nuevos consumidores con muy conscientes del impacto que tienen sus hábitos. Están muy comprometidos con el planeta y, en este sentido, buscan que las marcas que consumen sean sostenibles y respetuosas. Las nuevas generaciones se informan muy bien antes de comprar: leen las etiquetas de los productos para ver su origen y composición.
Sylvie Desvignes, Education Manager de Kevin.Murphy
“Los pequeños gestos pueden ayudar mucho. Es necesario proteger al planeta”.
¿Por qué consumir de acuerdo al veganismo?
Ser vegano es una forma de vida que apuesta por el cuidado de uno mismo y del mundo que nos rodea. Siguiendo esta corriente estamos alejándonos de algunos de los efectos negativos de nuestra forma de vida y además formando parte de un movimiento social de apoyo a nuestro planeta. Merece la pena consumir vegano porque los pequeños gestos pueden ayudar mucho. Es necesario cambiar para proteger la naturaleza, los océanos, nuestro ecosistema.
¿Estamos cambiando?
Sin duda. KEVIN.MURPHY ha sido consciente de ello desde sus inicios. Es una marca que siempre ha tenido claro que no quería contribuir al deterioro del planeta, sino todo lo contrario. Y entre otras cosas por eso nos hemos comprometido a realizar envases con plástico reciclado. Hoy por hoy, son muchas las marcas que están actuando del mismo modo. Y, del mismo modo, están actuando muchas marcas.
Imagen destacada en B/N: Fotografía de Lalo Lando, extraída de Barrancópolis
resorts ofrecen una gran variedad de actividades de entretenimiento para todas las edades: siete piscinas y un parque acuático infantil, acceso directo a la playa y una amplia selección de actividades acuáticas y deportivas; un programa de actividades y juegos para toda la familia de la mano de POP Entertainment; espectáculos en directo durante el día o la noche, incluyendo animación infantil con los personajes de los Raggs; carrera de obstáculos Tropical Mud Race para toda la familia; clubs para bebés, niños y adolescentes; y numerosas excursiones a la playa y a los principales puntos turísticos. Además de un servicio de mayordomía, los clientes de TRS Hotels tendrán la posibilidad de acceder a todos los servicios e instalaciones de 
¿Dónde está el origen de tu compromiso con esta causa?
Hace unos años, de vez en cuando, en Televisión, nos sorprendían con unos espacios llamados “Minutos Musicales”. Sin previo aviso, nos sorprendían con varios videos de diferentes artistas que servían para descubrir “cosas nuevas”, que en casa, mi hermano y yo, aprovechábamos para grabar en VHS y hacíamos cintas recopilatorias de videos maravillosos que veíamos una y otra vez.
Corría el año 1993. Yo estaba estudiando en la universidad y devoraba todos los vinilos, cds o casetes que, por unas razones u otras, acababan en mis manos. Tenía walkman, discman… todos los aparatos que por aquella época me permitía escuchar música en el metro o en el bus.
En esa época universitaria, en la que la música era una parte fundamental en mi día a día -y ya no ha dejado de serlo-, me atraían mucho los grupos que, con guitarras contundentes y sonido más o menos duro, tenían una vocalista femenina. Había varios, muy buenos y, en un principio, The Cranberries no me llamó especialmente la atención con Linger o Dreams, las primeras canciones que escuché de su primer álbum Everybody Else Is Doing It, So Why Can’t We? (1992). Fue más tarde, escuchando un CD recopilatorio, de los que regalaban algunas revistas; sonó el tema Daffodil Lament y creo que lo puse 3 o 4 veces seguidas, pensé: “qué temazo». Al día siguiente, creo que fue, escuché ese himno llamado Zombie y, desde ese momento, los discos del grupo pasaron a formar una parte importante de mi colección.
Siempre me ha gustado Fernando Alfaro. Lo conocí con el primer álbum de Surfin’ Bichos La luz de tus entrañas (1989), que le tocó a mi hermano, junto con otros discos de la época, en un concurso de la radio. Participábamos en todo lo que podíamos, y nos tocaba, de vez en cuando, alguna cosa más que interesante.
Toca hablar del segundo y último álbum de una artista con mayúsculas, que, por desgracia, no supo digerir el éxito.
The Killers, una formación original de Las Vegas, rompió muchos moldes en 2004 con el lanzamiento de su primer álbum, Hot Fuss, un auténtico arsenal de temazos capitaneados por el pegadizo Somebody Told Me, que no paraba de escuchar una y otra vez. Para muchos es su mejor disco hasta la fecha. En 2006 lanzaron Sam’s Town, que (efectivamente) lo tenía muy difícil con su predecesor pero, para mi, lo superó y con creces.
Si tengo que nombrar el grupo español que más me ha sorprendido en los últimos años, sin duda es León Benavente.
de reuniones como los cuatro despachos de dirección son acristalados impulsando una cultura de transparencia. El área de trabajo, dispuesto como espacio abierto, flexible y versátil permite que la información fluya libremente entre trabajadores, managers y directivos a la vez que, gracias a los paneles de separación entre escritorios, se cuida la salud de todos en tiempos de covid.
La revista Influencers finaliza un año muy complicado con un número en el que la calidad de sus protagonistas y su influencia está fuera de toda duda.
